Este es el primer material de vida práctica que pusimos en septiembre y a los peques les encanta: la caja de cerraduras de madera mejorada (Aquí). Como podéis ver en las imágenes es una casa de madera (como bien su nombre indica) que en cada una de sus paredes y en el techo incorpora un tipo de cerradura diferente: un pestillo, un candado, una palanca, una cadena...
El momento de presentación fue muy divertido, puesto que nada más verla empezaron a gritar porque tiene un aspecto muy llamativo y atractivo. Una vez que lograron volver a sentarse en un corro todos, evidentemente querían abrir alguna cerradura. Y lo mejor de todo es que cada vez que abres una se sorprenden ¡¡a ver, a ver!!, ¡está vacía! jejeje nos divertimos un montón viendo sus reacciones, y eso que ya sabían desde la primer cerradura que estaba vacía.
Lo que más me gusta es que las cerraduras no son fáciles de abrir, lo que hace que no sea un material de cinco minutos. Alguna de las cerraduras son bastante complicadas y requieren paciencia y destreza, lo que permitirá que quieran utilizarla desde los de tres (aunque no abran todas las cerraduras puesto que las llaves aún no se las he sacado) hasta los de cinco años. También os he preparado una foto de todas las cerraduras para que podáis ver que es muy variada. Para los que me preguntan después la nuestra la hemos conseguido en Bonicos.
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