Comenzamos realizando un fondo con una técnica que utilizamos desde hace muchos años, pintar rodando canicas. Comenzamos colocando sobre la tapa de una caja una cartulina del color que prefirieran. Continuamos echando unas gotas gordas de pintura negra y blanca y utilizando las pinzas echamos encima tres canicas gordas. Terminamos moviendo la tapa para que las canicas se muevan por toda la cartulina arrastrando pintura. Al acabar de pintar retiramos de nuevo las canicas utilizando las pinzas y así no nos manchamos.
Así de chulos quedaron los fondos.
En una segunda sesión nos dibujamos nosotros mismos y lo pegamos recortado encima del fondo y terminamos pegando también un pequeño cartel en el que hemos escrito nuestro nombre. La evolución tanto en el dibujo como en la escritura de su nombre es muy grande.
Y este es el resultado final.
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