Como ya hemos contado en entradas anteriores este trimestre estamos aprendiendo muchas cosas sobre el cuerpo y las emociones y no podíamos olvidarnos de nuestra identidad sexual.
Hemos tenido largas y profundas conversaciones sobre qué cosas nos diferencian a las chicas y a los chicos. Es increíble que todavía niños tan pequeños ya tengan tan interiorizados estereotipos de identidad sexual que les condicionan para realizar algunas actividades: el rosa es de chicas, los niños no lloran, las muñecas para las niñas, el fútbol para los chicos etc... En clase hemos estado dialogando sobre todo ello y algunos de estos prejuicios se han caído por su propio peso simplemente al darse cuenta de que la seño, yo misma, es una chica pero tiene el pelo corto (a veces muyyy corto), no lleva pendientes (ni siquiera tiene agujeros en las orejas), no se maquilla etc... Recuerdo un día que me maquillé ligeramente y cuando llegué a clase un peque me dijo: "SEÑO HOY VIENES DE CHICA". Evidentemente ese día tuvimos una de nuestra charlas de las que os hablaba anteriormente, jejeje.
También clasificamos los nombres de la clase según si son chicos o chicas. Y finalmente realizamos una ficha individual para nuestro dossier del cuerpo en la que tuvimos que colorear el niño o la niña según correspondiera a cada peque y escribir tres nombres de niños y tres nombres de niñas de la clase.
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